domingo, 19 de abril de 2009

Oda a la Normalidad

Hace apenas dos dias... me disponía a ir hacia el coche con mi acompañante (no, era mi padre, tranquilos...) cuando, cual fué mi sorpresa al ver la cantidad de personas, o almenos eso creía, con atuendos, como mínimo, estrafalarios(1). Es normal, pensé, al fin y al cabo estamos en la Estación del Norte, pero salimos, y continuaban... como un ejército un día sin combate, llenaban las calles.


(1)--> Cuando digo estrafalarios, es extremadamente anormales, sin sentido alguno ni profundidad donde buscar un postrer recodo de estética moral.

(Dicho esto, y antes de proseguir, quiero, lejos de toda sospecha, aclarar que cada uno es como es y viste como viste, sin querer juzgar a nadie y solo guiandome por mi criterio he escrito esta reflexión.)

Pues bien, mi intención no es otra que hacer un llamamiento a la acción (pensaba decir a la normalidad, pero todavía no la han encontrado), actúen, déjen de vestirse como quisieran ser en su mundo interior y Sean; parezcan normales, cambien su nulo mundo interior por su rico mundo exterior, y conviertan su mundo interior en rico y su mundo exterior en pobre; conviértanse en adalides del pensamiento, no del embellecimiento; no sean carne de cañon, Sean el cañon. No participen, ni del consumo, ni de los líderes políticos ni de mentiras semejantes, dirijan sus vidas. Cuando todos se dirijan, cambiaran el mundo, si no, el mundo les cambiará. Levanten sus puños y golpeen el mundo, digan: "Ya Basta!", que se estremezcan ante su paso, que tiemblen, pues no sabran donde estan, detrás de cada joven puede haber un agitador, que lo sientan, que tengan miedo, seamos la vanguardia intelectual y, a la vez, combativa, que no cuenten ni tan siquiera con un ápice de su apoyo que les dé legitimidad para dirigir sus vidas; que les vean pasar pensando: "Se le ve un chicos con futuro..." y ríanse, ríanse todo lo alto y fuerte que puedan dentro de si mismos, contemplen al engaño al que les estan sometiendo y piensen, piensen que: "Claro que tengo futuro! Lo que no saben es que el futuro, es mío!"; porque a los osados pertenece el futuro y eso nadie podrá cambiarlo, es cuestión de tiempo; como es cuestión de tiempo que cambien; pero claro, les pertenece el futuro, no el tiempo...

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